02/01 - Interés para la salud

Consejos para cuidarse del sol

Durante el verano, e incluso en los meses previos a su inicio, muchas personas procuran broncearse para así poder lucir un “buen color” en la playa. Sin embargo, hacerlo sin tomar las debidas precauciones puede acarrear serios problemas para la salud. Tanto los rayos solares como las lámparas de rayos ultravioletas y otros artefactos utilizados para dicho fin pueden ser peligrosos y causar:

– Cáncer de piel.
– Trastornos oculares.
– Debilitamiento del sistema defensivo para combatir las enfermedades.
– Manchas en la piel de aspecto desagradable, arrugas y piel curtida.

 

Permanezca a la sombra

Evite los rayos solares entre las 10 y las 16 hs. Si el día está nublado, no se confíe, pues los rayos pueden atravesar las nubes.

Cubra su cabeza con un sombrero

Un sombrero de ala ancha ayuda a defender del sol el cuello, los oídos, los ojos y la cabeza.

 

Use anteojos para sol

Compre únicamente anteojos para sol con un sello que garantice que los lentes pueden bloquear entre el 99 y el 100 por ciento de los rayos solares. Si no poseen ese sello, no compre los anteojos.

 

Proteja su cuerpo

Mientras esté bajo el sol use ropa liviana; a fin de cubrir todo el cuerpo, pueden usarse camisas con mangas largas y pantalones o faldas largas.

 

Evite los métodos artificiales para broncear la piel

No resulta conveniente utilizar lámparas de rayos ultravioletas ni camillas bronceadoras, ni tampoco píldoras y cosméticos para broncear la piel.
Los cosméticos bronceadores son aplicados para darle a la piel un tono canela oscuro. En ocasiones el color puede ser removido con agua y jabón y otras veces desaparece en unos pocos días. Pero, en ningún caso, estos productos son lociones aptas para proteger la piel contra el sol.

 

Use protector solar

Los protectores solares son productos de uso externo que contienen sustancias físicas y/o químicas que actúan como barrera protectora de la piel a las radiaciones solares. Constituyen una defensa de primera línea, siempre que reúnan condiciones necesarias de eficacia, seguridad y calidad.
Generalmente, conviene utilizar un protector solar con un FPS 15, como mínimo, y tener en cuenta lo siguiente:
– Aplicar el protector solar en la piel 30 minutos antes de exponerse al sol.

– No olvidar colocarse el protector solar aún en las partes sensibles como partes calvas de la cabeza, orejas, cuello, nariz, empeines de los pies y manos.

– Usar también protector labial.

– En caso de niños menores de 6 meses, consultar con el médico sobre la conveniencia de su aplicación.
Para constatar si un determinado protector solar se encuentra autorizado, puede consultar el “Listado de Protectores Solares Autorizados”, dentro de la sección “Cosméticos”.