11/05 - Institucional

La guardia, un servicio con múltiples desafíos

Queremos dar a conocer a nuestra gente. Para eso nos adentramos en el servicio de guardia de la Clínica y de la mano de la Dra. Virginia Korol, una de sus coordinadoras, conocemos un poco más de su trabajo diario.

La jornada laboral de este Servicio comienza a las 8 de la mañana, con el pase de guardia. “Este es un momento tranquilo, que no dura mucho, porque el día en una guardia es vertiginoso y tiene el desafío de no saber qué casos llegarán” describe Virginia.

En cada uno de los turnos, hay dos médicos, un coordinador y refuerzos ante un llamado. La mayoría de los pacientes que atienden presentan casos clínicos, pero los residentes de cirugía, ginecología y anestesiología tienen rotaciones fijas en la Guardia.

Cabe destacar, la dedicación de los médicos y de los enfermeros responsables del sector. “No hay tiempo de descanso en una guardia”, comenta la Dra. Korol. Y agrega: “se almuerza o se duerme en los momentos que no hay demanda de pacientes”. La guardia es un ámbito en el que los profesionales comparten muchas horas e intentan que la convivencia sea lo más agradable posible, entre ellos y con los pacientes.

Por otro lado, es muy importante que las guardias funcionen ordenadamente. Cuando un paciente llega a ellas lo hace por alguna dolencia que considera urgente, ya sea por algo tan simple como un dolor de cabeza hasta una situación que requiere cirugía, y necesitan resolverlo de manera rápida y efectiva.